miércoles, 29 de febrero de 2012

Mi elixir.


Música tienes el poder de curar.
Tienes esa poción mágica en tus notas.
Tienes el poder de hacerme surcar los cielos,
De atravesar las coloridas nubes, de atravesar los atardeceres.
De cruzar el mar sin ahogarme, de bailar en un tornado sin lastimarme.
Me das la mano y me ayudas a caminar por el laberinto.
Eres mi espada contra los enemigos.
Eres mi llave a mi mundo, un mundo cálido y sin problemas.
Donde solo yo puedo pasar y la mochila de problemas queda atrás.
Música eres mi amiga, eres mi fiel compañera.
Tienes el don de sanar las más profundas heridas, tienes el poder de hacerme sonreír.
Con tus melodías coses mis heridas.
Pero también puedes reabrirlas, descoser las cicatrices, hacerlas sangrar.
Puedes soltarme, hacerme caer de las nubes y hundirme en el mar.
Y de tus notas me aferro para no caer pero el viento se las llevo y sigo cayendo.
Aun así nunca me abandonas, siempre logras salvarme.
Siempre apareces nadando entre el mar salado como un delfín.
Apareces en lo más oscuro del mar y me llevas a tocar las nubes.
Música tienes el poder de sanar.
Fluyes en mí sanándome por dentro.
Eres mi elixir.
Sáname! Sáname! Yo te escucho, te comprendo.
Música tienes el poder de sanar.
Fluyes en mí sanándome por dentro.
Eres mi elixir.
Ardnajela Ricle.

miércoles, 22 de febrero de 2012

El fantasma y el mar.

El éxodo comienza, me voy lejos.
Mi alma, mi corazón, mi mente huye de tu fantasma.
En una caravana mágica huyen.
Lejos! Me voy para no oír mas tu canción.
Huyo de tu fantasma, de tus risas, de tus ojos avellanas.
Huyo de los recuerdos que perforan mi corazón.
Al mar me voy.
Un mar cree con mil lágrimas. Un océano llene.
Un océano nos separa en el tiempo.
La brisa marina me trae esas imágenes que quise dejar atrás.
La arena escoce mis ojos al igual que esa vieja película que intento olvidar.
Corro por el peñasco pero tu fantasma es más rápido.
Me escondo entre los huecos de las rocas pero aun así me encuentras.
Me escondo en el hueco de mi pecho pero aun así me encuentras.
Maldito mar de lágrimas, hoy me iré contigo.
Atravesare el océano que nos separa
Tu fantasma me seguirá y nadara con mi fantasma.
Un mar entero te dedique, cada gota de ese mar lleva tu nombre.
Pues ya no mas.
No mas! Basta!
Sino puedo huir de ese fantasma me uniré a el.
A dios corazón, aquí te destierro de mi cuerpo.
Un barquito de papel flota con un corazón.
Las olas rompen en el peñasco y mi garganta rompe a viva voz.
Gritándole al mar y a tu fantasma.
A dios!
Libre mi cuerpo baila en el mar.
A dios!

Ardnajela Ricle.

miércoles, 15 de febrero de 2012

Bailando con gotas de lluvia.


Gotas, lluvia, caricias acuáticas que acarician mi ventana.
Cristalinas y brillantes me saludan desde la ventana.
Dibujando caminos se desplazan por mi ventana.
Caminos que se enredan, se separan y se vuelven a unir.
Gotas que dibujan historias en mi ventana.
Una cortina fría e intensa cae sin cesar afuera de mi ventana y me invita a abrazarla.
Dulce la lluvia me llena de su frescura.
Gotas que escriben historias fuera de mi ventana y me invitan a ser parte de ellas.
Dulce lluvia me lleva de la mano, fuera de mi ventana estoy junto a todas esas gotas.
Gotas que me invitan a escribir una historia junto con ellas.
Sal de tu refugio y baila bajo la lluvia.
No le temas a la lluvia, no le temas al viento,
no le temas a los rayos, no le temas a esa tormenta que siempre está presente.
La lluvia me lleva de la mano, el viento me canta y los rayos iluminan el camino.
No todas las tormentas son malas.
Las tormentas son malas solo si así quieres que sean.
Bailando bajo la tormenta estoy junto a un millón de gotas.
Bailando con la lluvia, el viento y los rayos.
Sal de tu refugio y baila bajo la lluvia.
No le temas a la lluvia, no le temas al viento,
no le temas a los rayos, no le temas a esa tormenta que siempre está presente.
Ardnajela Ricle.

domingo, 12 de febrero de 2012

Esa Magica Ceguera.


Esperanza una simple palabra, una simple palabra que puede quemar viva a una persona.
Esperanza, el último suspiro de un naufrago.
Esperanza, el último aliento de un maratonista.
Es lo último que se pierde suelen decir, es lo que mueve al mundo.
Es ese esa suave capucha nos ponen cuando nacemos para que salgamos a la luz.
Es esa dulce mentira que saboreamos mientras no ahogamos.
Es eso que usamos como aire.
Es eso que nos mantiene a flote cuando el barco se hunde.
Es la sangre que corre por nuestras venas cuando nos desangramos.
Es esa ceguera mágica llena de colores.
Esperanza es nuestra balsa hacia la isla de lo deseado.
Es la balsa hacia la vida eterna.
Estamos a flote mientras nadie se empeñe en derribarla.
Barcos piratas pueden bombardearnos pero cuando más fuerte es nuestra ceguera más fuerte es la balsa.
Cuanto más deseemos mas fuerte será la balsa.
Podremos ser consientes de nuestra ceguera pero preferimos estar ciegos.
Preferimos impregnarnos de esa mágica  ceguera antes de dejarnos ahogar.
Preferimos creer que la orilla esta cerca antes de ver el inmenso océano en el que nos ahogamos.
Esperanza es lo último que se pierde. Tal vez sea cierto.

Ardnajela Ricle.

sábado, 4 de febrero de 2012

Donde los frutos mortales crecen.

Un día el sol se oculto tras las colinas de la tierra media.
Un día bajo el manto de colores del crepúsculo el se fue.
Monto en su corcel y dejo a la pequeña bruja.
Desde ese día una canción se escucha en el viento.
Buscadme donde los arcos tienen asiculas.
Buscame donde los frutos mortales crecen.
Buscadme bajo el árbol más antiguo.
Buscadme donde los bastones mágicos crecen.
Buscadme donde la madera es rojiza.
Mientras las nubes se teñían de rosa y naranja, el corcel y su jinete dejaron la tierra media.
Un día la bruja camino por el bosque en busca de madera para su arco.
Tarareando la canción que el viento le susurraba, busco aquel árbol que los guerreros usaban.
Tarareando la bruja también decidió buscar madera para su nuevo bastón.
Tarareando la bruja también busco palillos para la adivinación.
Saludo al Fresno, al Avellano, al Sauce.
La hierba acaricio sus pies y unas hojas de Roble acariciaron su rostro.
Se interno en el bosque cantando.
Buscadme donde los arcos tienen asiculas.
Buscame donde los frutos mortales crecen.
Buscadme bajo el árbol más antiguo.
Buscadme donde los bastones mágicos crecen.
Buscadme donde la madera es rojiza.
Cansada de caminar se sentó bajo la copa de un árbol
Acaricio sus hojas, y al extraño árbol que extendía su copa sobre su cabeza le susurro.
Tu eres aquel de madera rojiza?
Del árbol cayeron ramitas, la bruja las miro.
Del árbol cayeron arcos, bastones, palillos y frutos mortíferos.
Del árbol una puerta se abrió.
Del árbol un caballero salio.
Oh! Mi querida bruja al fin me has encontrado.
Has encontrado la puerta al otro mundo.
La bruja desgusto aquel extraño fruto, se colgó el arco en el hombro.
De la mano el caballero y la bruja atravesaron el portal.
Unidos por la magia ambos viajaron a un mundo nuevo y mágico.
Unidos por la magia ambos atravesaron al Taxus Baccata.

Ardnajela Ricle.

jueves, 2 de febrero de 2012

Espada de risas.


Los fantasmas del pasado me empujan al abismo.
Los espíritus soplan copos de hielo en mi corazón.
El huracán me arrastra al abismo.
Mis uñas se hunden en la hierba, y arañan las cortezas de los árboles.
Los recuerdos del pasado, y las imágenes del presente me empujan al abismo.
Pero con uñas me aferro a esta tierra.
Pero los recuerdos del pasado, aquellos que una vez me hicieron reír intentan sujetarme.
Cuerdas doradas se enroscan en mí.
La gélida lengua de frió se deleita con mi corazón.
Pero mi fuego la quema, y el fuego de aquellos recuerdos que una vez me hicieron reír.
Aquellos momentos dorados intentan sujetarme.
Me aferro a las cuerdas del pasado para no caer.
Busco en aquel antiguo  cofre mi espada, yo se que en algún lado la deje.
Los fantasmas me empujan al abismo.
Los viejos fantasmas y los nuevos quieren lanzarme al vació.
En un torbellino oscuro me envuelven y me llevan al abismo.
Puedo escuchar al mar romper en las rocas, puedo escuchar los gritos del viento.
Pero las cuerdas doradas me sujetan y las ansias por volver a vivir bañan mis venas.
El recuerdo de una sonrisa, mi espada.
Cuerdas que me sujetan, cuerdas que se queman en mi corazón avivando el fuego.
La escarcha comienza a cubrir mi corazón pero el fuego se hace más vivaz.
La lucha entre el fuego y el hielo.
Dos batallas, una sola guerrera.  Y los fantasmas que me empujan al vació.
Pues no podrán conmigo!
Mi armadura como el Roble es.
El recuerdo de una sonrisa, una espada.
La oscuridad de la tormenta se cernió sobre mí.
Escuche al mar y mis uñas ya no sentían la tierra.
Silencio, eterno silencio.
Ya no había fantasmas, ni viento, ni frió, ni abismo bajo mis pies, ni cuerdas doradas.
Silencio y calma.
Una luz cegadora borro la oscuridad, y mi espada derroto a los fantasmas.
El fuego venció al frió y el abismo desapareció.
Aquí estoy bajo el roble meciéndome en la hamaca donde una vez sonreí de oreja a oreja,
Donde una vez mi corazón hirvió llenándome de luz y fuego.
El recuerdo de una sonrisa, una espada.
Una sonrisa, una luz, una armadura, una vida.
Aquí estas! Mi luz. Mi propia luz que nadie logro ni lograra apagar jamás!
No podrán lanzarme al abismo!
Porque aquí estoy  con mi espada dispuesta a dar batalla.
Porque como el Roble soy y les daré batalla hasta el final.
Fantasmas ya no podrán hacerme mal, frió te destierro de mi corazón.

Ardnajela Ricle.